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¿Por qué arrasó?

La victoria de Claudia Sheinbaum en las elecciones de 2024, con una ventaja de 32 puntos porcentuales sobre su principal competidora Xóchitl Gálvez, se puede explicar a través de varios factores interrelacionados: el legado y la popularidad del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), una campaña electoral bien ejecutada y la debilidad de la oposición. Estos elementos fueron claves para que Sheinbaum y la coalición Sigamos Haciendo Historia, encabezada por Morena, triunfaran de manera contundente.

1.     Popularidad y aprobación del gobierno de AMLO

AMLO ha sido fundamental en la política mexicana en los últimos años, manteniendo altos niveles de aprobación gracias a sus políticas sociales y su estilo de comunicación directa con la ciudadanía. Según el tracking-poll de Consulta Mitofsky, seis de cada diez mexicanos aprueban su gobierno. Esta popularidad se traduce en un fuerte respaldo no solo para él, sino también para los candidatos asociados con su movimiento. Claudia Sheinbaum, como sucesora de AMLO, se benefició enormemente de esta conexión. Los votantes vieron en ella la oportunidad de continuar con las políticas y el enfoque de AMLO, lo que generó un respaldo importante.

A pesar de posibles actos de corrupción en su círculo cercano,[1] la reputación y credibilidad de AMLO parecen mantenerse intactas. El presidente ha sido percibido como un líder cercano al pueblo, atendiendo las necesidades de los sectores más vulnerables. Su discurso constante de apoyo a los pobres y su compromiso con la justicia social fueron asimilados profundamente entre los votantes. Tal legado fue decisivo para Sheinbaum, quien se presentó como la garante de estos valores.

Los programas sociales implementados por AMLO, como la Pensión para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores, Sembrando Vida, Jóvenes Construyendo el Futuro, y la Beca para el Bienestar Benito Juárez, han creado una base de apoyo sólida y leal a Morena. Según una exit-poll de El Financiero, siete de cada diez votantes beneficiarios de algún programa social votaron a favor de Morena y sus aliados.[2] Según cifras oficiales, 35 millones de hogares remunerados,[3] consolidaron el apoyo a Sheinbaum.

2.     Campaña electoral eficaz

En una era donde las redes sociales juegan un papel fundamental en la política, la campaña de Claudia Sheinbaum utilizó eficazmente estas plataformas para movilizar a los votantes, especialmente a los jóvenes entre 18 y 34 años. La candidata difundió su mensaje de manera amplia y efectiva, conectando con un electorado diverso y movilizando a sus bases.

Las redes sociales permitieron a Sheinbaum acercarse a los votantes jóvenes, respondiendo a sus preocupaciones y presentando sus propuestas de manera accesible. Además, la campaña utilizó estos canales para contrarrestar ataques y desinformación, asegurando que su mensaje llegara claro y sin distorsiones.

La campaña de Sheinbaum combinó eficazmente la promesa de continuidad con las políticas sociales del gobierno y la introducción de cambios necesarios para mejorar áreas críticas. Este enfoque equilibrado fue escuchado por los votantes que buscaban estabilidad, pero también progreso. Con los mensajes “Continuidad con Cambio” y “El segundo piso de la Transformación”, Sheinbaum se posicionó como una candidata capaz de mantener los avances logrados por AMLO mientras se comprometía a abordar nuevos desafíos. Además, los “Diálogos para la Transformación” le permitieron a Sheinbaum legitimar entre sus bases partidistas su programa de gobierno.

3.     Debilidad de la oposición

La oposición, compuesta principalmente por PAN, PRI y PRD y aglutinada en la coalición Fuerza y Corazón por México, se encontró fragmentada y con dificultades para presentar una alternativa unificada y convincente. Las disputas internas y la falta de cohesión disminuyeron su capacidad para atraer a votantes indecisos y para enfrentar a la maquinaria electoral de Morena. Los escándalos de corrupción de Alejandro Moreno, líder del PRI,[4] y la falta de oficio político de Marko Cortés, presidente del PAN, también afectaron negativamente la imagen de la oposición.[5]

Fuerza y Corazón por México no logró articular un mensaje claro y atractivo que pudiera competir con la narrativa de continuidad y cambio propuesta por Sheinbaum. En lugar de presentar una visión alternativa, la oposición se vio envuelta en conflictos internos y mensajes contradictorios, lo que minó su credibilidad y efectividad. El eslogan “Vida, Verdad y Libertad” de Xóchitl Gálvez tenía potencial, pero no logró consolidarse porque no ofrecía un proyecto alternativo al de Morena.

Los antecedentes de corrupción de los gobiernos anteriores del PAN y PRI continuaron afectando su imagen pública, disminuyendo la confianza del ciudadano en su capacidad para gobernar eficazmente. Muchos votantes prefirieron continuar con Morena en lugar de arriesgarse con una oposición percibida como corrupta e ineficaz. De acuerdo con El Financiero, cinco de cada diez ciudadanos apartidistas votaron por la coalición morenista.[6] Para el arrollador triunfo de Sheinbaum, la estrategia de Morena de reclutar liderazgos regionales de otros partidos con perfiles competitivos también fue muy eficaz para abrir la brecha de votos.

4.     Movilización de la base electoral

Morena demostró una capacidad superior para movilizar a su base electoral. Las estructuras de apoyo territorial y la organización a nivel local fueron esenciales para asegurar una alta participación de votantes a su favor. Las redes de apoyo, armadas con la gestión de los Servidores de la Nación y articuladas durante el sexenio en todo el país, resultaron clave para movilizar a los votantes y asegurar una participación efectiva en las urnas.[7]

Este trabajo meticuloso y sostenido en las colonias de todo el país construyó confianza y compromiso con el proyecto de Morena, garantizando que los votantes se sintieran parte de un movimiento político —a veces de manera voluntaria, otras bajo coacción. La colaboración de los 23 gobernadores de Morena y aliados resultó fundamental en la movilización electoral, contribuyendo al éxito del partido y de su candidata presidencial.

El respaldo de sindicatos, organizaciones campesinas y otros grupos de interés también jugó un papel central. Sindicatos como el de los maestros, petroleros y electricistas vieron en Morena un aliado para sus causas y trabajaron activamente para asegurar su victoria.[8] La capacidad de Morena para atraer y mantener el apoyo de estos sectores organizados fue crucial para consolidar su base electoral y asegurar una victoria decisiva.

5.     Factores socioeconómicos

La promesa de Morena de combatir la desigualdad y reducir la pobreza tuvo un fuerte atractivo en un país donde estas cuestiones siguen siendo problemáticas. La percepción de que Morena está comprometido con las necesidades de los sectores más desfavorecidos consolidó su apoyo entre los votantes de bajos ingresos, quienes vieron en el partido una opción que podría mejorar sus condiciones de vida. Según la exit-poll de Ulises Beltrán & Asocs., “la clase media de México, incluida la clase media alta, votó en una proporción de tres a dos más por Claudia Sheinbaum que por Xóchitl Gálvez”,[9] un fenómeno también observado en la citada encuesta de El Financiero.

Las políticas de AMLO dirigidas a reducir la desigualdad y mejorar las condiciones de vida de los más vulnerables tuvieron eco entre los votantes. Sheinbaum, al posicionarse como la figura de la continuidad de estas políticas, logró captar el apoyo de aquellos que han visto mejoras tangibles e inmediatas en sus vidas gracias a las iniciativas de Morena. En el caso de las clases medias, estas también vieron atendidas sus demandas históricas para combatir la desigualdad. Así, la promesa de seguir avanzando en esta dirección, con un enfoque en la justicia social y la equidad, fue un factor decisivo para asegurar su victoria.

6.     Conclusiones

El triunfo de Claudia Sheinbaum en las elecciones del 2 de junio de 2024 no puede comprenderse sin reconocer el rol de AMLO y Morena como componentes vertebrales de una maquinaria electoral poderosa y eficaz. Estas estructuras contribuyeron de manera decisiva al éxito electoral de Sheinbaum. Sin embargo, la contienda electoral enfrentó desafíos importantes en términos de equidad y cumplimiento de normas. Una de las principales preocupaciones fue la realización de campañas adelantadas con autoridades electorales absolutamente disminuidas. Otra preocupación fue el ilegal activismo presidencial durante la contienda. El uso de recursos públicos y privados para fines electorales también contribuyó a la inequidad por la compra de votos. Además, el crimen organizado afectó la libertad de los votantes y la competencia justa entre los candidatos.

Es imposible regatear el triunfo electoral de Claudia Sheinbaum. Su victoria es clara y no está en disputa. Sin embargo, el sistema electoral requiere reformas legales. Con el control absoluto del Congreso, es poco probable que el próximo gobierno busque corregir los vacíos y vicios del régimen electoral. Ganaron con contundencia y no tienen incentivos para hacerlo. En sentido contrario, es posible esperar un recrudecimiento autoritario hacia un sistema menos abierto y competitivo. Al tiempo.

[1] Ver reportaje de Latinus en https://latinus.us/2024/03/11/el-clan-los-sobornos-de-la-red-de-andy-y-bobby-lopez-beltran-para-colocar-balasto-en-el-tren-maya-ponen-en-riesgo-a-los-pasajeros/.

[2] Consulta realizada el 5 de junio de 2024 en https://www.elfinanciero.com.mx/encuestas-ef/2024/06/04/respaldo-a-4t-y-a-amlo-apuntala-triunfo-de-sheinbaum/.

[3] Consulta realizada el 5 de junio de 2024 en https://lopezobrador.org.mx/2024/01/25/programas-para-el-bienestar-alcanzan-inversion-sin-precedentes-de-2-7-billones-de-pesos-en-el-gobierno-de-la-cuarta-transformacion/.

[4] Ver en https://www.informador.mx/mexico/Alito-Moreno-es-acusado-de-corrupcion-y-lavado-de-dinero-20240428-0045.html.

[5] Ver en https://www.eluniversal.com.mx/elecciones/lee-aqui-el-acuerdo-integro-entre-el-pri-y-el-pan-para-la-eleccion-de-coahuila/.

[6] Ver los resultados de la encuesta en https://www.elfinanciero.com.mx/encuestas-ef/2024/06/04/respaldo-a-4t-y-a-amlo-apuntala-triunfo-de-sheinbaum/.

[7] Los Servidores de la Nación representan una fuerza operativa de aproximadamente 35 mil personas, adscritas a la Secretaría de Bienestar, encargadas de promover, de casa en casa, cara a cara, en todo el país, programas sociales federales.

[8] Ver https://www.infobae.com/mexico/2024/05/02/que-sindicatos-apoyan-a-claudia-sheinbaum-en-su-carrera-por-la-presidencia-de-mexico/.

[9] Ver nota en https://www.bgc.com.mx/estrato-social-del-sufragio/.

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Said Hernández Quintana

Said Hernández Quintana es politólogo experto en elecciones, colabora en Integralia Consultores y es doctorante en Ciencias Sociales y Políticas en la Universidad Iberoamericana.

Tweeter: @SaidHernandezQ1


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